El exjugador y exentrenador blanquiazul, coruñés y gallego universal y, por encima de todo, Deportivista Luis Suárez Miramontes (A Coruña, 2 de mayo de 1935) falleció hoy en Milán a los 88 años de edad.
Luis Suárez es una auténtica leyenda del fútbol español y mundial y, pese a que su paso por el RC Deportivo fue corto, ha sido un ídolo y una referencia para varias generaciones de coruñeses y Deportivistas. Pese a afincarse lejos de su tierra, nunca renunció a sus raíces y nunca perdió ese acento gallego tan característico.
El 'Arquitecto', como era apodado, es el único jugador español que ha sido premiado con el Balón de Oro (1960) y a lo largo de su carrera alcanzó prácticamente todas las mayores victorias que puede lograr un futbolista. Fue campeón de Europa con la selección española (1964), de la Copa de Europa de clubes y de la Copa Intercontinental con el Inter de Milán (1964 y 1965), de la Liga española con el FC Barcelona (1959 y 1960) y de la italiana con el conjunto 'nerazzurro' (1963, 1965 y 1966).
Además, Luis Suárez, que fue 32 veces internacional, jugó dos Mundiales (1962 y 1966). Y, por si fuera poco, al Balón de Oro de 1960 sumó el de Plata en 1961 y 1964 y el de Bronce en 1965.
'Luisito', como era conocido en sus inicios, comenzó a jugar al fútbol en el Perseverancia de Santo Tomás, en su Monte Alto natal, y pronto se incorporó a la disciplina deportivista para jugar en el primer equipo juvenil de la historia del Club, cuando el técnico argentino Alejandro Scopelli implantó el sistema de categorías inferiores, y después pasó al Fabril.
Durante la temporada 1953-54 dio el salto al primer equipo. Debutó con el Deportivo el 6 de diciembre de 1953, en el campo de Les Corts frente al FC Barcelona, que goleó a los blanquiazules (6-1) y además tomó buena nota de la calidad del joven y genial futbolista coruñés. El Dépor, como puede verse en la foto superior, formó aquel día con Otero; Tomás, Rodolfo, García; Zubieta, Mangriñán; Arsenio, Oswaldo, Pahíño, Luis Suárez y Marroig.
Luis Suárez solamente jugó ese y 16 partidos más (todos en Liga de Primera División, en los que sumó 3 tantos) con la camiseta blanquiazul. La directiva lo traspasó al club azulgrana junto a Dagoberto Moll antes del final de aquel curso 1953-54, entre el final del campeonato liguero y comienzo del torneo de Copa. En su despedida, ambos recibieron la Insignia de Oro y Brillantes del RC Deportivo (foto superior).
Pese a su sideral trayectoria deportiva, el futbolista coruñés nunca dejó de lado a su 'Deportiviño' y hasta sus últimos días hizo gala de su Deportivismo. Durante sus años como futbolista profesional, volvió a vestir la camiseta blanquiazul en diversos encuentros amistosos. Por ejemplo, en la semifinal del Teresa Herrera de 1969, que los blanquiazules ganaron al Charleroi belga con un gol suyo (el once de aquel día, en la foto inferior). Años antes, en marzo de 1966, medió decisivamente para que su gran Inter de Milán, vigente campeón de Europa, visitase al Deportivo en un encuentro amistoso que sirvió para que el equipo de su corazón pudiese limpiar las telarañas de su maltrecha caja fuerte (foto superior, en los prolegómenos de aquel encuentro entre los blanquiazules Manolete y Loureda).
Todos los veranos regresaba a pasar las vacaciones en su ciudad, donde se le podía ver entrenando en el Estadio o jugando alguna pachanga en la playa. Y en noviembre de 1978, tras haberse sentado en dos banquillos importantes del fútbol italiano como el de su amado Inter y el del entonces potente Cagliari, cogiendo las riendas de un Deportivo que tras 10 jornadas ocupaba puestos de descenso a Segunda División B.
Luis Suárez dirigió al Deportivo en 28 partidos, con el bagaje de 11 victorias, 7 empates y 10 derrotas que valieron la permanencia pero no, sorprendentemente, la continuidad en el cargo. En la foto inferior se le puede ver dirigiendo un entrenamiento en Riazor entre jugadores como Piris, Piña, Pousada, Gallego, Albino o Richard.
El funeral de Luis Suárez tendrá lugar el próximo martes 11 de julio a las 14.45 horas en la parroquia de San Giuseppe Calasanzio, en Milán. El RC Deportivo quiere mostrar su más sentido y sincero pésame a familiares, amigos, excompañeros y a todo el deportivismo. DEP.
