El RC Deportivo comenzó los años 50 fichando a dos nuevos jugadores sudamericanos, Corcuera y Oswaldo, que integrarán la delantera titular de estos años junto a Franco, Moll y Tino: tres argentinos, un uruguayo y un coruñés de San Pedro de Nós, conocidos como la "Orquesta Canaro". Esta delantera marcó, en la Temporada 1950-1951, 64 goles en 30 partidos. Pese a su enorme producción ofensiva, aquel equipazo evitó el descenso al imponerse en la última jornada, en Riazor, al Murcia.

Eran los comienzos de lo que entonces se llamó la "década de oro" del Deportivo y que se prolongó hasta 1957. Los resultados finales en la Liga de Primera División, en la que se mantuvo durante nueve temporadas consecutivas, fueron más que aceptables. Aunque en 1953 hubo de participar en una liguilla de Promoción, resuelta positivamente en la última jornada, con un inesperado e histórico triunfo en Balaídos ante el Celta (1-3), el Club alcanzó puestos que le permitían mantener la categoría con tranquilidad.

Además, en esta década el Deportivo disfrutó de entrenadores como Helenio Herrera (técnico en aquella Promoción) y de jugadores como Luis Suárez y Pahíño.

A esa considerada edad de oro del Deportivo le sucedería una etapa de esperanzas y desilusiones compartidas, del sube y baja, a pesar de contar el Club con grandes jugadores para gloria del fútbol nacional y mundial. Todo comenzó con el descenso al final de la Temporada 1956-1957, al que le siguió una dramática Promoción de Permanencia en la categoría de Plata. El equipo blanquiazul evitó el descenso a Tercera al derrotar en aquella eliminatoria a doble vuelta al Ourense.