- Foto: RC Deportivo/cedida por la Familia López No -
El 29 de octubre de 1944, hace hoy 75 años, Riazor abría sus puertas por primera vez a un espectáculo deportivo. Aquel domingo, Deportivo y Valencia disputaron el partido inaugural del Estadio Municipal de Riazor.
El conjunto 'ché' se llevó la victoria por 2-3 y su jugador Vicente Hernández fue el primero en anotar un gol en el coliseo coruñés. Paquirri fue el primer deportivista en dejar su firma en las redes de las nuevas porterías. El Deportivo estrenó su nuevo terreno de juego con Acuña, Pedrito, Portugués, Molaza, Bienzobas, Caballero, Viso, Guimeráns, Paquirri, Lezama y Marquínez, a las órdenes de Ramón Lafuente. Por el Valencia, entrenado por Eduardo Cubells, saltaron al césped Eizaguirre, Pechuán, Juan Ramón, Monzó, Iturraspe (que años después sería entrenador deportivista), Llácer, Epi, Vicente Hernández, Igoa, Asensi y Gorostiza. Dirigió la contienda el asturiano Álvarez Santullano, auxiliado en las bandas por los gallegos Couso y López No.
Desde entonces, Riazor ha sido escenario de más de 1.500 partidos oficiales y más de 200 encuentros amistosos del Deportivo, además de otros 600 del Fabril desde 1964, año en que se convirtió en filial único deportivista.
Ideado en 1938 por el arquitecto municipal Santiago Rey Pedreira y puesto en marcha gracias al empeño del entonces Concejal de Urbanismo y posteriormente Alcalde José Pérez-Ardá, el Estadio de Riazor comenzó a construírse a finales de 1939.
Las obras se extendieron durante prácticamente cinco años, para acabar dando forma al estadio más moderno de España en unos momentos en los que el país atravesaba una dura posguerra. Riazor fue un estadio pionero arquitectónicamente, al ser el primero de España en contar con un graderío en voladizo, la icónica Grada Elevada, y con una cubierta, la de Tribuna, sin pilares que entorpeciesen la visión de los espectadores.
A lo largo de estos tres cuartos de siglo, el Estadio sufrió dos grandes remodelaciones. La primera, a principios de los años 80, para poder albergar partidos de la Copa del Mundo de la FIFA celebrada en España en 1982, en la que se derribó toda la construcción original, salvo la Torre de Marathón. La segunda, mediados los años 90, para cerrarlo por completo por ambos fondos prescindiendo de la pista de atletismo.
En los últimos años, el recinto entró de lleno en el siglo XXI. Primero, con el patrocinio que lo ha convertido en Estadio ABANCA-RIAZOR desde 2017. Después, con diversas obras parciales cuyo punto culminante fue la reforma y rehabilitación de la cubierta, en 2018.
Además de los miles de partidos de fútbol protagonizados por equipos blanquiazules y de haber sido sede del Mundial 82, Riazor alberga anualmente, desde 1946, el torneo de fútbol amistoso más antiguo del mundo, el Teresa Herrera. Igualmente, ha servido de casa de diferentes selecciones españolas y de la selección gallega absoluta en varias ocasiones. Sobre el césped de Riazor, que en decenas de ocasiones albergó la final de la Copa da Coruña, también vivió momentos de gloria el Karbo Deportivo, que logró en el tepe herculino la última de sus 3 Copas de la Reina.
Riazor fue construido con una marcada vocación polideportiva, con una pista de atletismo alrededor del terreno de juego y canchas de tenis, patinaje y frontón. El estadio herculino acogió a lo largo de los años un Campeonato del Mundo de atletismo de categoría militar, así como numerosos mítines atléticos en los que participaron algunos de los mejores atletas de siempre como Bob Seagren, Edwin Moses, Said Aouita o Javier Sotomayor. También fue escenario de varias llegadas de etapa de la Vuelta Ciclista a España, festivales de acrobacias aéreas y, más allá del deporte, grandes actuaciones musicales como el Concierto de los Mil Años.
Para conmemorar tal efeméride, el RC Deportivo pone a la venta hoy mismo 'Riazor 75', un libro que repasa sus tres cuartos de siglo de existencia. Los aficionados pueden conocer desde entresijos y datos sobre las diferentes obras y remodelaciones hasta disfrutar rememorando sus vivencias en el coliseo herculino a través de una completa cronología de eventos y competiciones celebradas en el mismo.
